sábado, 29 de septiembre de 2012

Ayer sentí MIEDO, hoy siento PENA

Estoy en mi casa y tengo miedo.


No recuerdo la riada del 73 porque estaba en Alemania trabajando, pero lo que vi ayer me tiene impresionado. ¡Qué barbaridad!

No quiero mirar a un lado y a otro buscando responsables, sólo quiero decirle a los “señoritos” que tanto aman el medio ambiente, esos que nos impiden limpiar los cañales, los que siembran tarays y otras especies en el río, a los que no nos dejan ir con las cabras por el río, que vengan ahora y que hablen del medio ambiente.

Seguramente ellos estarán rellenando las solicitudes para próximas subvenciones en sus despachos o en sus casas, mientras nosotros ahora estamos lamentándonos y con miedo.

Hoy en cualquier bar de Antas, en cualquier rincón de nuestro pueblo, hemos hablado de “vosotros queridos desconocidos”, porque vosotros si sois responsables en gran medida.

Claro, yo soy un viejo que no sabe lo que dice…. Venid y a ver el río, la rambla, y el daño que se ha causado. Pero más tontos somos nosotros por haceros caso, y nuestras autoridades por ineptas.

Ayer sentí miedo; hoy siento pena.



lunes, 10 de septiembre de 2012

SOLEDAD "la del matigüelas"



Ya se acabó la Feria. Hay opiniones para todos los gustos, siempre depende del partido, de las ideas que uno tenga, de si vino la familia o no, si fuimos a la Era o dejamos de ir…Esto nos va a dar de sí varios días en la Moncloa. Menos mal, porque entre los chiquillos en la escuela, los forasteros que se marchan y la poca vida que hay, a ver cómo pasamos los días.
Pero dentro de lo que me propuse, no voy a hablar de la feria, sino de personas que tienen algo que decirnos a los antusos por lo que hacen o hicieron en su día. Hoy quiero hablar de Soledad “la del matigüelas”.
Es una costumbre que todos tenemos al llegar a la Era. Nuestra primera visita es a la Virgen, rezamos un poco (creo), miramos la imagen y nos hacemos la foto con la familia. Cada año una foto, cada año un recuerdo, cada año alguien que viene y alguien que ya no está.
Si miramos bien la foto, en el margen izquierdo, suele aparecer sentada en una silla, una señora siempre sola y en silencio. Es la guardiana de la Virgen mientras que está en la Era.
Al margen de si recibe un dinero o no por estar allí, al margen de que algunos miembros de la Hermandad hagan sus comentarios, creo que es de admirar a esta mujer, a Soledad “la del matigüelas”.
Los más viejos conocemos su historia de lucha y de penas; también sus alegrías y las esperanzas en sus hijos. Por eso la admiro más. Cuando fui el día de la Virgen y la saludé, le dije a mi nieto quién era aquélla mujer, y le recordé que hay que admirarla por todo lo que ha hecho en esta vida.
No solemos ser muy agradecidos, pero desde aquí, aunque no lo leas, GRACIAS SOLEDAD.