jueves, 29 de octubre de 2009

No es anónimo quien habla bien de otros.


He leído lo que he escrito hasta el momento y los comentarios que me habéis hecho llegar. Os doy las gracias a todos. Como todo en la vida, hay algunos que me gustan más que otros; con algunos me identifico, con otros no. Pero ahí está la libertad.
¿Quién soy yo?
¡Y qué más da! Da lo mismo cuál sea mi nombre, mi dirección, mi teléfono. Lo importante es que soy de Antas, y quiero traer a la memoria a la gente de mi pueblo, a la gente anónima que ha trabajado en él. No quiero ser yo el centro de nada, de ninguna conversación, no es mi interés.
Este verano estuve en una cena-homenaje a un antuso ilustre de quien hablaré otro día, y hablaban sobre este blog, y hubo opiniones para todos los gustos. Y pensaba para mi: este es mi pueblo, esta es mi gente. No dejaron títere con cabeza.
Como en algún comentario se atreven a juzgar el anonimato del abuelo, os diré que no soy anónimo, que tengo mi identidad y mi historia. Cuando hable mal de alguien pondré mi nombre y apellidos, pero sólo quiero hablar bien, que los más jóvenes conozcan a los abuelos de Antas. Y no permitiré, y así se lo he dicho a mi nieto, que haya comentarios que critiquen a la gente; que elimine todo aquello que vaya contra el espíritu de este blog.
¿Recordáis a Paco “el de la Iguala”? Venía cobrando los recibos para don Atanasio y don Félix. Era un hombre bueno y eficiente en su trabajo. Vivía en Aljáriz y tenia su tierra en Mendras. Era un hombre de confianza para todos, entraba a nuestras casas, hablaba con nuestras mujeres… respetuoso con todo y con todos. Conocíamos a los médicos y nos olvidábamos de Paco. Creo que igual que a mucha gente, se le debe un homenaje.
Tendríamos que hablar con su familia, con “los Rayos” y que la memoria de este hombre no quedara en el olvido.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bien dicho, hay personas de desde detrás de la pantalla y con un teclado delante se creen dioses y no llegan nada más que a pobres diablos. Cuando hay cualquier noticia o comentario sobre la labor profesional de una persona la mayoria se cree con derecho a opinar sobre su vida personal, cuando ni siquiera la conocen, no es muy bueno alabarla pero lo peor es criticarla. Si no se conoce personalmente a una persona, y por conocer no llamo tomarte dos cervezas con alguien, digamos en el Casino, no hay que opinar sobre su vida, sólo sobre su trabajo.
Un saludo, y espero su escrito sobre Don Bernardo.

Anónimo dijo...

Apreciado abuelo: Me parece bien que busque el lado bueno, que hable bien de las personas ésto lo hace mas grande, me gusta esa expresion tan sencilla, directa, sensata, sin dobleces,la analitica tan nitida que emplea le proporciona un resultado muy positivo. Pero me gustaria que nuestras opiniones a sus escritos producieran nuevas intervenciones de Vd.,cuando lo crea necesario y si le apetece. un afectuoso saludo.

Anónimo dijo...

hola amigo anonimo,me gusta mucho su concepto del anonimato,a mi me pasa lo mismo,un anonimo para mi es el que no existe,nunca vimos,pero vive aqui.alomejor si nos fijasemos mas en lo que nos rodea veremos muchos anonimos,entre otros uno mismo.a seguir bien.